Una histeria innecesaria,
así como descabellada,
abandoné cuando te vi.
Sentí estragos en el pecho,
del más loco frenesí.
Abundancia de promesas,
y una súplica de ayuda
para ir juntos a la luna.
Pasional como sutil
me arrebataste el cielo y lo adornaste.
Y con el tiempo me enseñaste
Qué es el amor, y que en la cama no hay restricción.
Hoy sé que no debe existir
placer como admirarte reír.
Qué lindo despertar con mi Tiqui al lado ♥
Pero dormimos poquito así que aprovecho ahora a dormir una siestita y después a tomar el té con mi amigo Lucas!!
Les juro que son días en los que la felicidad no me cabe en el cuerpo (?)
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